Mercedes Corresponsal en Chiapas.
Compañeras y compañeros.
Veracruz y los veracruzanos se han ganado a pulso, a lo largo de su historia, ser considerada cuatro veces heroica por su voluntad, trabajo y mucho corazón. Por voluntad de la inmensa mayoría de los veracruzanos, después del 7 de julio Veracruz será cinco veces heroica por el triunfo de nuestro Partido.
El Puerto y todo Veracruz le han dado a lo largo de la historia, a los mexicanos, motivos de profundo orgullo y de satisfacción, es ésta la sede del primer municipio de América en el ya lejano 1519.
Aquí cerca se suscribieron los Tratados de Córdoba para la Independencia de México.
Por ello, esto que se convierte en el legado de nuestros antecesores nos obliga a hacer lo propio para que esta generación de veracruzanos aporte a la grandeza del estado y de la patria toda.
Y nos gustan los retos, porque así el triunfo sabe mejor.
En su tiempo fueron Ignacio de la Llave y Lerdo de Tejada.
Años más tarde Heriberto Jara, Miguel Alemán o Adolfo Ruiz Cortines o Luis “Pirata” Fuente o Beto Ávila, en el mundo deportivo.
Muchos han puesto en alto el nombre del estado y del país.
Pero la gloria no es permanente, hay que ir tras ella y conquistarla a pulso. Y en la política, los retos son especialmente formidables, y así nos gusta a quienes militamos en el PRI y en los partidos aliados, nada es concesión graciosa ni producto de la casualidad.
Por eso, me da mucho gusto que hoy iniciemos con el pie derecho y pisando fuerte el camino al triunfo, ese triunfo que será producto del trabajo y del entusiasmo, y entusiasmo significa llevar dentro a Dios.
El entusiasmo repleto de ideas, de planteamientos y compromisos que le van a cambiar positivamente la vida a las personas, porque el PRI y sus aliados, es un partido cumplidor porque sabemos que nos hacemos responsable de los demás en una actitud fraterna y honrada.
Por eso, vamos hoy, y nueve semanas después, a construir el triunfo como acción colectiva, como respuesta de los veracruzanos a quienes pensamos y actuamos de buena fe y con base en la ley para merecernos la confianza convertida en votos y devolverla de la única manera posible: con resultados, que son los que merecen los veracruzanos.
Y no nos podemos mantener al margen de muchas de las cosas que se dicen y se hacen en el mundo de la política. Con más intención malsana que honrando a la verdad, algunos acusan de clientelismo, seguramente, mirándose al espejo, alegando prácticas que les son propias y de las que sobran ejemplos en lugares donde algunos deberían gobernar.
Exigen imparcialiad los que en otras entidades persiguen a nuestros compañeros priistas y amedrentan a todos quienes no piensan igual que ellos, ésos que han despilfarrado capital público y capital político y han sido incapaces para persuadir con buenos resultados.
Ésos que acusan lo que no quieren ver, pero lo han tenido o lo tienen en su propia casa, pretenden imponer lo que ellos no quisieron o no pudieron poner en marcha cuando tuvieron una oportunidad desperdiciada.
Para nosotros, los priistas veracruzanos y del país, estamos comprometidos no sólo con la legalidad sino con la gente y con la ética política.
Aquí nosotros acreditamos en los hechos y no en los discursos, la voluntad y la capacidad para transformarnos. Un partido empeñado en ser cada día más transparente y eficaz en la lucha contra la corrupción.
Hoy, desde Veracruz y para todo el país, el PRI reitera su compromiso con la legalidad, de cualquier partido y quien sea. Si alguien la hace, que la pague.
El PRI reitera su rechazo al uso político de los programas sociales y el repudio a quienes medren políticamente con la necesidad de las personas.
El PRI no quiere, no necesita ventajas mal habidas para ganar, sabe cómo persuadir y convencer.
Estamos decididos a contribuir con la implementación de las medidas necesarias para impedir el uso político o electoral de los programas de gobierno en los procesos de elección en curso en éste y en 13 estados del país.
Queremos –de buena fe, pero sin ingenuidad– contribuir en la toma de medidas para conseguirlo, algunas de corto plazo, prácticas y eficaces; otras de mayor calado que, seguramente, se convertirán en cambios legales para desterrar para siempre suspicacias y sospechas que acaban sólo dando lugar a los pretextos.
Hoy que todos los partidos somos gobierno, hoy que se ha revitalizado el concepto de oposición, tenemos que asumir con responsabilidad el mandato de la gente porque éste no es para que le vaya bien a los políticos sino para que las personas vivan mejor.
Por eso, en el contexto del Pacto por México estamos trabajando con todas las contrapartes, es decir, con los demás partidos y el Ejecutivo Federal, para blindar todas las elecciones.
Hay en el compromiso número seis del Pacto por México el enunciado, el compromiso de establecer el Sistema Nacional de Programas de Combate a la Pobreza, para advertir que esta no es una coyuntura y que si alguien pretende obtener ganancia en el corto plazo, tiene más mala fe que ganas de que este México cambie.
Amigas y amigos:
Nosotros no tenemos duda, como lo dijera Colosio: el PRI sólo demanda imparcialidad en el ejercicio de gobierno, firmeza en la aplicación de la ley, no queremos ni concesiones al margen de los votos, ni votos al margen de la ley.
Nada ni nadie nos regalará el triunfo.
La victoria vendrá de nuestro trabajo, del esfuerzo de ustedes, de su dedicación y compromiso con las causas más nobles de este país.
Va a depender el triunfo de nuestra organización –que es la más robusta–; de nuestros candidatos, que son los mejores; y de nuestras propuestas, que son las más atractivas para los veracruzanos, porque no se hicieron en el secreto de una oficina con especialistas en la materia; se hicieron y se harán en el contacto cotidiano con quienes viven, porque padecen los problemas.
Un buen político es un buen intérprete de lo que la gente quiere. El que pregunta más, se equivoca menos.
Por eso vamos a ganar.
Y vamos a ganar la elección en 212 municipios de este gran estado y en las 30 diputaciones, porque este México profundo, este México de las entrañas, se construye de la periferia al centro y de abajo hacia arriba. El estado de Veracruz es robusto porque los municipios son fuertes, la Federación será próspera porque Veracruz y las otras entidades federativas contribuirán a que así sea.
Porque me da mucho gusto advertir –y ustedes lo saben más– cómo se sigue construyendo y transformando a Veracruz. Claro que vamos adelante con Javier Duarte de Ochoa al frente y un gran equipo de veracruzanos, con él y todos ustedes, primer lugar nacional en petroquímica básica; primer lugar en reforestación; primer lugar en producción de caña de azúcar y de arroz.
La UNESCO reconoció las prácticas veracruzanas como las mejores para la conservación del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad al Centro de Artes Indígenas de Papantla, sólo como botón de muestra.
Pero esto que Javier Duarte de Ochoa hace con enorme esfuerzo, con dedicación y amor a su tierra, es parte de un gran organismo político del que ustedes y yo integramos con responsabilidad.
Me da mucho gusto poder destacar que en esta difícil, en esta ardua tarea, Javier Duarte de Ochoa también tiene aliados que con base en la ley hacen su trabajo, sirven a Veracruz y sirven a todos los estados del país.
En la cámara del Federalismo, en el senado de la República, garante del Pacto Federal, tenemos –además de nuestros senadores– de José Yunes y Héctor Yunes, a Emilio Gamboa Patrón.
Los presidentes municipales que tendrán una responsabilidad por primera vez de cuatro años en Veracruz, los senadores, los legisladores locales, los diputados federales –con Manlio Fabio Beltrones en la coordinación– todos nosotros, la gran familia priista distinguiendo con claridad entre la imparcialidad a la que estamos obligados por la ley, pero que no podemos ser neutrales, porque estamos comprometidos con un proyecto de país, vamos a cerrar filas con Enrique Peña Nieto, transformador de México.
Amigas y amigos:
Tengo claro que el reto que tenemos por delante no es sencillo, somos un partido que sabe de la gran competencia electoral, a esa nos atenemos porque somos competitivos, y el que es competitivo no sólo tiene la actitud de competir sino de estar listo y preparado para ganar. Y lo vamos a hacer en un ambiente de unidad, en un ambiente del que todos contribuyamos a ser más grandes y mejores, no con esa unidad pasiva que entraña no hacer nada en contra del proyecto común, sino la unidad activa en la que todos tenemos algo que aportar y construir, primero en una campaña y después en un gobierno.
Por eso me place destacar la alianza que con el Partido Verde, con el Partido Nueva Alianza, y lo más importante, la alianza con los veracruzanos va a ser fructífera porque no sólo es para ganar elecciones, sino para gobernar bien y decirle a la gente que estamos a su disposición y le servimos eficazmente todos los días.
Amigas y amigos:
En Veracruz soplan vientos de transformación, de renovación, esos vientos tienen rumbo, y ese rumbo nos lleva unidos al triunfo del próximo 7 de julio. Así recuperaremos cabalmente a México, así ganaremos Veracruz, y lograremos –como dice el himno– que esta tierra siga siendo verdad, tierra de paz y amor.
¡Que viva el PRI!
¡Que viva Veracruz!
¡Que viva México!