Muchas filosofías definen los apegos como las cadenas que nos atan a personas u objetos, algo con lo que debemos romper para experimentar la vida libremente, pero más que una cadena que nos mantiene atados, es comparable con una especie de tubería que une dos extremos y permite el flujo a través de esta, sin ninguna atadura o encadenamiento.
Gracias a tus apegos es que puedes amar y recibir amor de todos tus seres queridos, gracias a los apegos es que puedes disfrutar de la comida, música u objetos que posees.
Todas estas experiencias «viajan» a través de los apegos. Vivir sin apegos es negarte a dar y recibir amor y negarte a disfrutar de la vida.
El problema con los apegos es cuando lo que viaja no es amor sino resentimiento o cualquier otra emoción desagradable, o también cuando ya no llega nada de esa tubería y estás empeñado en querer que llegue más.
También te esperamos los viernes a las 11:00 AM en Belisario Domínguez No. 13, La Enseñanza, Casa de la Ciudad. Clase semanal matutina grupal.
Tú eres la única persona que puede sanar tus emociones y salir de tu oscuridad.
Te recordamos que en cada clase hablamos de un tema diferente, no es necesario asistir semanalmente a cada clase, pero en cada clase aprenderás un concepto nuevo de esta herramienta que te permitirá integrar por tu cuenta las emociones desagradables que experimentes y disolverlas, desde la primer clase que asistas.
Atentamente, Vajra Tay, profesor de IE y Adhyapaka en la tradición budista Mahajrya.
¡Infinitas gracias! 🙂
