MÉXICO, D.F., octubre 8 (EL UNIVERSAL).- Cortesía. El gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, clausuró hoy jueves la Casa de Gobierno del estado, con la finalidad de ahorrarse 400 mil pesos mensuales.
“Raza, hoy clausuré la Casa de Gobierno. Con esto ahorraremos 400 mil pesos mensuales que utilizaremos en mejorar NL”, publicó en su cuenta de Twitter.
Rodríguez Calderón, conocido como “El Bronco”, colocó un candado a la lujosa casa luego de hacer un recorrido por todos los rincones del inmueble.
En las imágenes se puede apreciar que la casa cuenta incluso con alberca.


La Casa de Gobierno se ubica en la avenida Morones Prieto en el municipio de San Pedro.
AMLO no es adversario para 2018: ‘El Bronco’
El gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, afirmó que no ve a Andrés Manuel López Obrador como adversario para 2018, y ante los señalamientos del tabasqueño de que es un instrumento de Carlos Salinas de Gortari, respondió que aunque cuando era alcalde de García dijeron que era aliado del cártel de Los Zetas, acabó con ellos.
Rodríguez Calderón respondió al mensaje de Twitter que el lunes difundió el presidente del consejo nacional de Morena donde señaló: “Mucho ojo, no se equivoquen, El Bronco encarna el salinismo, es independiente del pueblo, no de la mafia en el poder”.
A pregunta expresa dijo: “Ya no sé qué decir de mi compadre Andrés Manuel, no sé qué miedo tiene. Yo ya dije otra vez, lo voy a invitar a jugar beisbol; en el beisbol jugamos en equipo, y él quiere ser dueño del bate y la pelota; quiere pitchar y no puede.
“Que no se preocupe por mí, o sea, yo no voy a ser su contrincante, él va a ser su propio contrincante”, dijo.
Sobre el hecho que López Obrador lo relacione con Diego Fernández de Cevallos y afirme que “encarna el salinismo”, El Bronco expresó que “cuando fui alcalde de García todo mundo decía que yo era Zeta y me chingué a Los Zetas, luego me hicieron jefe del Cártel del Golfo, y también limpiamos esa ciudad de eso, también dijeron que era maricón y no soy”.
El gobernador —quien ha sido mencionado por analistas políticos como un posible candidato presidencial por la vía independiente para 2018— expresó que no se va a confrontar con el tabasqueño. “Ni me afecta ni me beneficia lo que él diga”, asentó.
“Debe dedicarse a chambear, no me ha respondido lo que le pregunté… pregúntenle, en qué trabaja el muchacho, de qué vive, tiene 12 años de flojo, no tiene ningún empleo, no tiene ningún negocio, nada. Dice que vive de las aportaciones de los voluntarios, ‘ah bueno’”, expresó.
—¿Será que lo ve como adversario para 2018?, se le preguntó a Rodríguez Calderón.
—“Yo a él no”, dijo, dando por terminada la rueda de prensa.
El Bronco inauguró la tarde de este martes el Foro Internacional de Negocios Bovinos Carne 2015, donde anunció que de los mil 300 millones de pesos anuales que la anterior administración de Rodrigo Medina gastaba en medios de comunicación “para enaltecer la soberbia de un gobernante”, ahora que no se gastará un solo peso en televisión, se invertirán 300 millones de ese dinero para repoblar el hato ganadero en Nuevo León.
En su segundo día formal de actividades como gobernador, Rodríguez Calderón hizo reír a los aproximadamente 150 engordadores de ganado del noreste del país cuando en su discurso de inauguración se dirigió a sus paisanos de Galeana.
“Por cierto, ¿no se les atravesó un cabrito, un queso… nada? ¿Ni siquiera unos piñones? Chingado, estamos jodidos. ¿Trajeron lonche o no?”
“Los conozco y son mis amigos”, se justificó ante los asistentes, al tiempo que una señora morena y chaparrita, se acercó hasta el estrado y le entregó una bolsa de plástico transparente con poco menos de medio kilogramo de piñones. “Es una de las cosas que más me gustan, y aproveché porque sé que siempre cargan”, dijo complacido El Broco a la audiencia.
Durante el encuentro con los engordadores anunció que llevará a cabo un programa para que éstos le suministren carne al gobierno a fin de venderla a precio subsidiado a familias de escasos recursos.
Dijo que su administración será austera hacia adentro, no hacia afuera, pues a ningún funcionario se le pagarán restaurantes, ni a él como gobernador. “Ya resolví el problema, todo el que quiera invitarme, paga”.