A partir del próximo el 7 de diciembre los doctores deberán realizar una solicitud ante el ministerio de Salud cubano para salir de la isla por asuntos particulares.
El anuncio se realizó el martes a través de una extensa declaración gubernamental publicada en el diario oficialista Granma.
El comunicado explica que la decisión fue tomada «ante la necesidad de garantizar un servicio de salud eficiente y de calidad, así como mitigar las afectaciones que hoy se producen como consecuencia de la política migratoria selectiva y politizada de los Estados Unidos hacia Cuba y la creciente contratación no planificada de médicos cubanos en otros países«.
En 2013 el gobierno cubano había permitido a los médicos salir del país por motivos personales, igual que el resto de los ciudadanos, tras una ley que eliminó la mayoría de las trabas migratorias que, durante cinco décadas, limitaron la libertad de movimiento en el país.