FILADELFIA (AP) — En una noche histórica, Hillary se convirtió el martes en la primera mujer que lidera a un gran partido en la campaña por la Casa Blanca, rompiendo una barrera histórica que se le escapó hace ocho años.
La candidata puso un enérgico final a la segunda noche de la convención demócrata al aparecer en una video conferencia desde Nueva York y declarar a los entusiastas delegados «Acabamos de poner la mayor grieta en el techo de cristal hasta ahora».
Unos minutos antes, el expresidente Bill Clinton tomó el papel de devoto esposo político al describir a su esposa como una apasionada «hacedora de cambios», en un discurso sobre la personalidad de la candidata. El expresidente describió con gran detalle sus más de 40 años de unión política y personal.
«Lleva mucho tiempo aquí», admitió. Mostrando su experiencia como una virtud, añadió: «Ella vale cada año que ha dedicado a mejorar la vida de la gente»:
Para un hombre más acostumbrado a discursos centrados en medidas y políticas, la sentida comparecencia de Clinton recalcó una noche histórica para los demócratas y el país. Si gana en noviembre, los Clinton podrían ser también la primera pareja casada en la que ambos han ocupado la presidencia.
Hillary Clinton se enfrentará a Donald Trump, que ganó la candidatura republicana hace una semana. El empresario, que el martes tenía un acto de campaña en North Carolina, se burló con antelación del discurso del expresidente y dijo que estaba «sobrevalorado».
En la convención republicana de la semana pasada, la aspirante demócrata fue el blanco de duras críticas a su personalidad y su juicio, un drástico contraste con la mujer cálida y apasionada que describió su marido. En un intento de explicar las diferentes percepciones sobre su esposa, el expresidente dijo simplemente: «Una es real, la otra inventada».
El expresidente rememoró el momento en el que una aventura extramatrimonial llevó a su impugnación y a un intenso escrutinio sobre su matrimonio. Aunque sus asesores creen que sus indiscreciones pasadas son viejas noticias para los votantes, en ocasiones han vuelto a quedar sobre la mesa durante la campaña, con Trump a menudo liderando el ataque.
Bill Clinton ofreció el discurso principal de la segunda noche de convención demócrata, una alegre celebración de la nominación formal de la candidata.
Los delegados estallaron en ovaciones cuando el principal adversario de Clinton en las elecciones primarias, el senador federal Bernie Sanders, ayudó a oficializar la nominación cuando fue el turno de votar para su estado, Vermont, lo cual fue una importante exhibición de unidad para un partido que trata de sanar divisiones profundas.
Fue un impactante paralelismo al papel que jugó Clinton hace ocho años cuando tomó el micrófono en la sede de la convención y apoyó a su ex adversario, Barack Obama.
Esta vez, Hillary Clinton rompió el techo de cristal que se le resistió en 2008.
Ahora lidera un partido aún dividido. Unos momentos antes de que lograra la candidatura, un grupo de partidarios de Sanders abandonó el encuentro y acudió a una carpa de medios para protestar por lo que consideraron fue su aislamiento en el partido. Al mismo tiempo, manifestantes que habían pasado el día marchando bajo el sol empezaron a plantarse ante la policía.
Trump celebró los incidentes desde su acto de campaña. En una convención de Veteranos de Guerras Extranjeras, afirmó que «nuestros políticos les han fallado por completo».